Por: Yhonny Rodríguez

Periodista

CNP 25.976

[email protected]

Ciudad Bolívar.-

 Hola, soy Yhonny Rodríguez, director del semanario turístico,  ASOCANAIMA, “Haciendo Turismo”, tuve el honor de conversar vía telefónica y realizarle una  breve entrevista, al cantante de música llanera, Tirso Ávila, un verdadero ícono de la música llanera. Nacido en San Carlos, Estado Cojedes, Tirso es un cantante que ha logrado trascender las fronteras de Venezuela con su música.

  Sus melodías, como “El Guayabo de un Poeta”, “Soy Un Pobre Campesino”, “Soy Un Borracho Perdido”, “Viejo Caporal”, “Bajo el cielo del llano viejo”, “Caney sabanero”, entre otras, han logrado tocar los corazones de todos los seguidores de la música llanera. Pero más allá de su talento musical, lo que realmente destaca de Tirso es su humildad y sencillez, valores que se reflejan en cada una de sus interpretaciones.

  A lo largo de los años, Tirso ha ganado varios festivales y concursos, entre ellos, “La Panoja de Oro”, “El Silbón de Oro” y “Araucano de Oro”. Estos reconocimientos han cimentado aún más su lugar en la historia de la música llanera, y han demostrado que su talento es indiscutible.

  Pero Tirso no es solo un cantante. Es un poeta del llano, un narrador de historias que, a través de sus letras, nos transporta a los vastos paisajes de Venezuela. Sus canciones son un reflejo de su amor por su tierra y su gente, y es este amor el que resuena en cada nota que canta.

  En resumen, Tirso Ávila es más que un cantante de música llanera. Es un embajador de la cultura venezolana, un artista que, con su voz y su guitarra, ha logrado capturar la esencia del llano y compartirla con el mundo. Su música ha logrado trascender las fronteras de Venezuela, y ha tocado los corazones de aquellos que han tenido el privilegio de escucharla.

Para aquellos de nosotros que hemos tenido el privilegio de escuchar su música, no podemos sino agradecerle por ello. Tirso Ávila, con su humildad y talento, ha logrado convertirse en un verdadero embajador de la música llanera, y su legado perdurará en el tiempo.

Cortesía

Prensa Asocanaima